¿Te cuesta manejar conflictos en tu equipo?
Eso puede drenar energía y afectar los resultados.
La clave está en enfocarte en los intereses detrás de las posiciones.
Aprendé a escuchar más allá de las palabras y encontrarás soluciones que beneficien a todos.
Practicalo en tu próxima reunión y después me contás el resultado.